lunes, 13 de abril de 2009

Ultraterreno: De Solcisticios y Equinoccios



Hola otra vez! A contrarreloj para llegar a la Facu, empiezo a escribir Ultraterreno. Creo que lo voy a dejar para más adelante >_>

Nota; dicho y echo, empecé a escribir esta entrada el mismo día que la anterior, y recién hoy la terminé xD

La semana Pasada fue Semana Santa, y si bien planificaba escribir esto antes, los horarios y las corridas, plus la ocupación de la única PC por miembros de la familia y la restricción constante en su uso diario, hacen a veces la escritura un cúmulo de nervios forzados que no son más que eso: soliloquios vacíos, palabras grises que no dan mucho y quitan en demasía.

Así que hoy puedo sentarme serenamente y escribirles. Como bien dije en el párrafo anterior, Semana Santa tiene mucho que ver con este texto, y lo es a la sazón de que cobra una importancia relativa en la vida de casi todos. Por lo menos, los habitantes Argentinos que me leen sabrán que, sea o no su credo, tenemos dos días de feria todos los años gracias a este importantísimo Rito Católico. Ya sea por el tiempo de serenidad, ya sea por el espacio de reflexión; ya sea por el viaje, el ajetreo, el poder descansar en el comienzo de un año. La Semana Santa (mal llamada, a mis ojos) conlleva una carga de misticismo popular tan grande, que hasta el más inamovible de los hombres siente afectada su vida, ligera o bruscamente, de una u otra manera. Ya es sabido en mis escritos que las circuntancias pueden variar y que los eventos pueden disfrazarse tras muchas máscaras, y éste no queda exento para nada.

A lo que quiero llegar abordando este texto desde esta costa, es a señalizar la tendencia que tiene el hombre, como animal social-metafísico, de señalizar el comienzo, el fin o las grandes bisagras del tiempo con esta clase de rituales. Tanto Semana Santa, como el Receso Invernal, como el Receso de Verano, como Navidad, como el Fin de Año, más popular y abarcativo de todos. La pregunta que tendría que formularse es; Porque el Hombre tiende a ritualizar y a recordar estos hechos, que terminan siendo cicatrices temporales?

Una de mis actuales profesoras definió Ritual como Hacer Presente a las Divinidades, como hacerse receptáculo de esa realidad, de esa lógica y de ese mundo (abstracto a ojos ajenos); como traer a nuestros días, a nuestra cotidianeidad, a ese fragmento sagrado de sazón y mística. No solo coincido con esta definición, sino que agrego: el Ritual es la instancia en que el hombre recuerda su condición de hombre, mediante la mecánica de la rutina en que devienen algunas de estas fiestas o estos carnavales; es la manera del Hombre de decir "Soy Hombre. Necesito mi Mundo Mortal de Polvo, necesito mis Rituales, necesito mi Año de Doce Meses. Necesito un día que tenga noche, necesito una vida que tenga treinta inviernos, necesito caminar y sentir las estrellas en mi piel. Lo Necesito por mi propia sanidad Mental y Espiritual".

Saliendo de mi lado Filosófico-Poético con el cual abordo los artículos, terminaré agregando que cada uno conoce sus propios límites y sabe qué tanta verdad cobra ese pensamiento de la necesidad del ritual en su propia existencia, de la necesidad de rutina. Los más firmes creyentes probablemente me negarán y me refutarán usando su propia concepción, esto es, usando la Fe como Espada y Escudo. No los desautorizo cuando digo lo que dije con anterioridad; todo lo contrario, comprendo su probable miedo ante mi declaración. Todos tememos a lo desconocido, y la amenaza de que un ser humano quiebre la precaria seguridad de nuestra realidad con sus afirmaciones. Es la Voluntad y la Convicción de cada uno (sazonada de una buena apertura de mente, cabe decir) la que nos sirve como base inamovible. Cada uno sabe qué Mundo Habita, por el solo hecho de existir.

A los que no sean de carácter religioso/místico, u odien los relatos que puedan considerar Fantásticos o increíbles, recomiendo abandonar la lectura ahora =P

Introduciéndome más en el Lado Metafísico de Ultraterreno, diré y contaré mi propia experiencia desde mis propios testimonios a priori. Creo en muchísimas cosas y en muchísimos sistemas religiosos como para enumerarlos todos (quizás algún día lo haga, pero no ahora. Tampoco le veo la gracia o el objetivo), pero creo que si me tuviera que definir de alguna manera sería como Pagano. Soy una suerte de aprendiz de Chamán, errante cuando la voluntad y el dinero me empujan a viajar, y amo la intensa vida espiritual que llevo. Es una faceta mía sin la que, creo, pudiera sobrevivir. Ahora mismo quisiera poder recibir las iniciaciones necesarias, pero todavía es muy temprano en mi camino para eso.

Este Domingo, y aprovechando la concentración y la agitación que estaba presente en la comunidad espiritual, realicé mi Saludo al Solsticio de Verano y al Equinoccio de Invierno, necesario de hacer en algún momento del año como aquellas "Bisagras o Cicatrices Temporales" de las que hablaba antes. Como la manera que más me agrada de ofrecer sacrificios y de performar mis rituales es con fuego, ejecuté el Rito de la Lengua de Fuego, que jamás había hecho antes y que quería hacer desde hacía bastante tiempo.
Cuando realicé el gesto significativo para entrar en comunión con el Otro Lado, es increíble la sensación de Plenitud y Sobrecogimiento que me invadió. Puedo testimoniar, tranquilamente, que sentía una energía tan poderosa en mi pecho, circulando furiosamente entre los tres chakras que están alojados en el torso, que casi sentía como si la misma hoguera que tenía delante mío se hallara dentro de mí. La Comunión duró lo necesario, y cuando hubo terminado me sentí tan colmado de Paz, Seguridad y Energía que decidí realizar algunas ataduras de protección en casa. No tiene caso definirlas, pero quiero asegurarles esto: puedo y voy a testimoniar (lo estoy haciendo ahora) lo que pude pasar.

Con el Testimonio (quizás burdo, quizás algo innecesario) solo quiero lograr esclarecer ese punto que decía antes, con una ejemplificación. Básicamente, para el creyente las Bisagras o las Cicatrices que se repiten en el tiempo son necesarias y se viven con una intensidad tal, que solo puede compararse con otra experiencia espiritual. Quizás algunos se vayan decepcionados de este texto; yo mismo no estoy muy satisfecho con él, pues siento que el mensaje está mal plasmado y termina siendo confuso.
Pero bueno, errar es humano, y cuando escribo suelo abusar de mi condición de humano

Un abrazo a todos, y hasta el Próximo Ultraterreno

El Pan de cada Día: Vicios y Costumbres


Buenas buenas, primera escritura de Abril >.< style="font-weight: bold;">no hay razón por la cual no puedas sonreír hoy.


Ya se, dos cosas antes de terminar; si, estoy MUY Hippie, pero por si no lo notaron, termina siendo denominador común de la gran mayoría de mis escritos de este tipo.
Y la otra cuestión, Hasta que punto llevar la máxima de la felicidad (incluyendo que se pase por encima de otro hombre), la pienso atender la próxima vez.

Ahora si, reflexionan y díganme; tienen su Pan de Cada día en la Mesa?